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El Leganés y el Getafe empatan en el Coliseum tras uno de los derbis más epicos de toda LALIGA EA SPORTS. En este artículo, te contamos como fue este gran partido.
El esperado derbi del sur de Madrid entre el CD Leganés y el Getafe CF culminó con un empate 1-1 en un encuentro lleno de emoción y tensión, tanto en las gradas como sobre el terreno de juego. En el Estadio Municipal de Butarque, los goles de Jorge Sáenz para el Lega y Borja Mayoral para el Geta decidieron un resultado justo para un partido donde el orgullo y la rivalidad histórica estuvieron más presentes que nunca.
Primer tiempo de alta intensidad y roces sobre el césped
Desde el primer minuto, ambos equipos dejaron claro que este no era un partido más. El ambiente en las gradas era eléctrico, y no solo las aficiones vivían el derbi con intensidad; sobre el césped también se notó una fuerte tensión. Las entradas duras y las confrontaciones entre jugadores fueron una constante a lo largo de los 90 minutos, reflejando la importancia emocional del partido para ambas escuadras.
A pesar de la intensidad, las ocasiones claras en la primera parte fueron escasas. El CD Leganés intentaba imponer su juego con una presión alta, mientras que el Getafe, fiel a su estilo, apostaba por la solidez defensiva y las rápidas transiciones. Sin embargo, las interrupciones por faltas y disputas entre los futbolistas no dejaron que el juego fluyera con normalidad, haciendo del primer tiempo un choque trabado. Aunque no hubo goles, se sentía en el aire que el partido podía explotar en cualquier momento.
Marko Dmitrovic: debut con gran actuación
Entre los aspectos destacados del partido estuvo el debut del portero serbio Marko Dmitrovic con la camiseta del CD Leganés. El exjugador del Sevilla cumplió con creces en su primera aparición, dejando muy buenas impresiones. Dmitrovic mostró seguridad bajo palos y realizó varias intervenciones clave, especialmente en el primer tiempo, para mantener el arco del Leganés en cero. Su liderazgo y capacidad para ordenar la defensa fueron visibles desde el inicio, ganándose el respeto de sus compañeros y de la afición pepinera.
Goles en los últimos minutos
Con el paso de los minutos, el partido se abrió, y las ocasiones comenzaron a llegar para ambos equipos. Fue el CD Leganés quien se adelantó primero en el marcador. En el minuto 76, Jorge Sáenz, aprovechando un córner, conectó un imponente cabezazo que dejó sin opciones al portero del Getafe, poniendo el 1-0 y desatando la euforia en Butarque.
Pero la alegría del Leganés fue efímera. El Getafe reaccionó rápidamente y, apenas siete minutos después, en el minuto 83, Borja Mayoral logró el empate tras aprovechar una desatención defensiva. Mayoral se filtró entre los centrales y, con una gran definición, batió a Dmitrovic para colocar el 1-1 definitivo.
Ambiente en las gradas y tensión en las pancartas
El derbi no solo se vivió con intensidad en el césped, sino también en las gradas, donde las aficiones de ambos equipos contribuyeron a crear un ambiente de máxima rivalidad. La hinchada del Getafe CF no perdió la oportunidad de provocar a la afición local, exhibiendo una pancarta polémica con el mensaje: "Castigad al hijo tonto", en clara referencia a la histórica rivalidad entre los clubes del sur de Madrid. Este gesto encendió los ánimos en Butarque, sumando un toque extra de picante al ambiente ya cargado.
Un derbi que dejó huella
El empate final dejó una mezcla de sensaciones para ambos equipos. El CD Leganés lamenta haber dejado escapar una ventaja en los últimos minutos, pero la buena actuación de su nuevo guardameta, Marko Dmitrovic, es un motivo de optimismo para lo que resta de temporada. Por otro lado, el Getafe CF rescató un valioso punto fuera de casa, aunque su juego sigue dejando interrogantes.
La tensión en el campo, con entradas duras y momentos de fricción entre jugadores, fue una prueba más de que este derbi se juega con el corazón en la mano. La rivalidad entre Leganés y Getafe sigue siendo una de las más apasionadas del fútbol madrileño, y este empate, aunque deja todo por decidir, prolonga una rivalidad que no parece tener fin.
El próximo enfrentamiento entre estos dos equipos promete ser tan o más intenso que este, y tanto en Butarque como en el Coliseum Alfonso Pérez, la emoción estará garantizada.